El objetivo de la estrategia, formalizada este viernes a través de la Resolución Ministerial 3613/2021, es controlar la enfermedad en niñas y niños de Argentina a fin de disminuir la morbimortalidad por varicela y sus complicaciones, así como la posibilidad de brotes en poblaciones vacunadas.
La introducción de esta vacuna al CNV en forma universal, gratuita y obligatoria desde el año 2015, con una dosis a los 15 meses de vida, se basó en el principio de equidad en salud, dado que la enfermedad afecta a las niñas y las niños independientemente de su condición social. Bajo el mismo principio se definió la oportunidad de dar inicio a la transición a un esquema de dos dosis a partir de enero del 2022.
La varicela es una enfermedad infectocontagiosa aguda producida por el virus varicela zóster, y es una de las enfermedades exantemáticas más frecuente de la infancia. En Argentina, previo a la introducción de la vacuna al Calendario Nacional de Vacunación, se estimaban alrededor de 400.000 casos nuevos cada año.
Si bien suele ser considerada una enfermedad benigna de la infancia, su evolución en niñas y niños no se encuentra exenta de posibles complicaciones y puede tener una evolución complicada o grave al afectar a otras poblaciones susceptibles de alto riesgo como adultos, embarazadas, personas inmunosuprimidas o con determinadas enfermedades subyacentes.