En tal sentido, André Blake, director nacional de Salud Mental y Adicciones del Ministerio de Salud de la Nación, sostiene que “las personas con más vínculos sociales, con la familia, los amigos, la comunidad, son más felices, más sanos y viven más. No se trata de la cantidad, sino de la calidad de las relaciones más cercanas, ya que vivir en medio del conflicto es muy malo para la salud”.
De esta forma, y con motivo de celebrarse el Día Nacional y Mundial de la Salud Mental, se hace hincapié en la importancia de estimular los factores protectores que pueden ayudar a alcanzar un estado de bienestar y afrontar situaciones desfavorables, como así también, a priorizar el respeto y promover la dignidad de aquellos con padecimientos mentales.
Además, se promueve la autonomía de las personas y la mejora de su atención, cuidado, y apoyo, con el fin de lograr una mejor calidad de vida, ayudando a reforzar los vínculos de quienes sufren algún padecimiento mental.